MATERIALES:
- Tablas de contrachapado cuadradas (o de la forma que más te gusten)
- Colgadores metálicos.
- Ganchos metálicos.
- Papel (de regalo, de decopatch, de colores abstracto...)
- Cola blanca.
- Crema de poliuretano.
- Cintas de telas diferentes.
En primer lugar, coloca el colgador metálico con un tornillito en la parte trasera de las tablas. Una vez que lo tengas, elige el papel y recorta aquello que más te guste. Puedes aprovechar imágenes completas, o hacer alguna composición.
Extiende cola blanca en la parte delantera del tablero, y coloca la imagen con cuidado de que no haga ninguna burbuja de aire. En función de la imagen que seleccionemos, podremos utilizar los percheros para el baño, la cocina, un dormitorio...
Cuando la imagen esté totalmente seca, con unos tornillitos, fija el gancho a la parte trasera de la madera:
De esta forma, podrás trabajar mejor con ellos. Antes de terminar de decorar el perchero, barniza el papel con crema de poliuretano. En algún otro trabajo, ya os he comentado; se trata de barniz en crema, muy cómodo, ya que apenas huele y además no gotea, quedando un acabado muy bonito y sobre todo resistente
Como veis en las fotos, aún se ven trozos de madera. Cuando el barniz se haya secado completamente, decoramos con cintas y trozos de tela, puntillas... para tapar los trozos visibles de madera. Las cintas se pegarán con cola, que una vez seca no se ve.
Podemos utilizar cualquier tela o cinta. Actualmente, podemos encontrar en las mercerías o tiendas especializadas de hilos y lanas, unas tiras de puntillas autoadhesivas que nos facilitarán mucho el trabajo.
Ahora sólo tienes que decorar a tu gusto hasta que cubras los trozos de madera. Aquí os dejo dos parejas de percheros terminados para que tengáis un par de ideas.
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